Resumen rapidito de una ceremonia de Oscar sosa y aburrida

(Por orden de aparición)

Seth MacFarlane puede que sea un buen guionista en sus series (de hecho algunas me gustan mucho), pero en sus presentaciones resultó aburrido y sin chispa. Quien más, quien menos, creo que todos añoramos al Ricky Gervais de los Globos de Oro. Ni siquiera los números musicales o los montajes cinematográficos llegaron a sorprender lo más mínimo. Nada reseñable, salvo la conexión final con la Casa Blanca y el minidiscurso de Michelle Obama.

Mejor Actor Secundario Christoph Waltz, previsible y merecido, por Django Desencadenado. Y ninguno se sorprendió, y eso que era su segundo Oscar como secundario, también dirigido por Tarantino (Gloriosos bastardos). Supernervioso y con la voz temblorosa, recogió su premio y dio las gracias, un actor que también ganó el BAFTA y el Globo de Oro por ambas (Bastardos y Django). Eso sí, una vergüenza estar nominado como secundario en una película que parece hecha a su medida y a la que a partir de ahora llamaré Waltz Desencadenado.

Brave, Mejor Película de Animación. Pues vale.

Mejor Fotografía:  Life of Pi, que no he visto, pero que me dicen que es muy bonita. El premio se lo lleva un chileno, Claudio Miranda, todo un ejemplo para un señor que ha trabajado de jefe de iluminación y de eléctrico.

Mejores Efectos Visuales: también para Life of Pi (vencedora por puntos, ya que se llevó 4 premios, más que ninguna).

El Mejor Diseño de vestuario, o Costume Design, no pudo ser para Paco Delgado. Se fue a Jacqueline Durran por Anna Karenina , profesional que antes de llegar al diseño de moda estudió Filosofía en Sussex.
El Oscar al Mejor Maquillaje, en cambio, sí fue para Los Miserables.  Un poco absurdo, la verdad, me dicen quienes han visto la de Delgado.



Inocente, Mejor Corto documental y Curfew, Mejor Corto de Ficción. Daniel Sánchez Arévalo dijo en twitter que eran mucho peores que los cortos nominados a los Goya. Él sabrá.

Mejor Película en Lengua Extranjera, esperado y muy muy merecido para Amour, con un Haneke parco en palabras y emocionado, probablemente por dentro.

Otro sin sorpresa: Anne Hathaway Mejor Actriz Secundaria, ella y sus pezones (de los que luego hablaremos).

Adele, y su Skyafall, Mejor Canción Original, aunque la Mejor Composición fue para Michael Danna por Life of Pi.

Mejor Guión Adaptado para Argo,  Chris Terro tenso hablando a toda pastilla.

Mejor Guión Original para Waltz Desencadenado, de Tarantino. En esta categoría también estaba nominada La noche más oscura, película que adapta –libremente– unos hechos reales. ¿Extraño que no estuviese entre las de Mejor Guión Original, no?

Life of Pi, Mejor Director para Ang Lee, increible, rompiendo todas las apuestas, y su namastee final al recibir el premio. Robo a Spielberg, dicen.

Mejor Actriz para Jennifer Lawrence, que se la pegó al subir a recibirlo. No se hizo daño, pero el vídeo estará por todas partes. Hugh Jackman y Bradley Cooper corrieron a socorrerla, aunque no hizo falta.



Mejor Actor Daniel Day Lewis,  con éste el tercero, esperado también, por un trabajo de método, perfeccionista, pero con muy poca alma, en Lincoln, que dicho sea de paso, se fue casi de vacío (Actor y diseño de Producción). Bromeó con sus barbas y la posibilidad de que a él le diesen el papel de Meryl Streep en La Dama de Hierro, y a ella el suyo en Lincoln. lo que quedará como una de las anécdotas de la noche, dicen que el spech más divertido, aunque soltado con muy poca gracia. Y otro fenómeno curioso, que tenga tres Oscar, pero ninguno por el que tal vez sea su mejor trabajo, En el nombre del padre.

Mejor Película para Argo, y suben al escenario a recogerlo Bryan Cranston –protagonista también de la serie Breaking Bad–, Ben Affleck, Clooney y demás productores. Ben Affleck, nervioso, da una lista rápida de gracias y dice que lo importante es levantarse otra vez. Todo un ejemplo de tenacidad, para una película que finalmente sólo consiguió tres premios en una ceremonia sin un vencedor por ko.




Anécdotas:

1.  El traje de Anne Hathaway, que según algunos despistaba porque parecía que se le marcaban los pezones, pero que en realidad no era más que un efecto especial de las costuras (y es cierto, no llevaba sujetador). Aunque la Hathaway ya ha demostrado que le importa un pimiento que se le marquen o no los pezones o incluso no llevar bragas. No lo parece pero ella es así. O quiere serlo.

2. Miss Shirley Bassey, con la voz muy justa, cantando y diciendo a lo bruto "Golfinga"(tema principal del Bond Goldfindger).

3. Liam Nesson, con cara de muy mala ostia, como recién salido de Taken. Leyó, presentó y desapareció.

4. A Travolta parece que el sembrado de pelo le ha crecido un poco. A saber qué injertos se habrá hecho.

5. Catherine Zeta Jones, bella como nunca en el número principal de Chicago, "All that jazz", delgada, no como en la peli. A la entrada con su marido, un Michael Douglas soberbio a sus casi 70 años. Quién pudiera.

6. Impresionante la voz de Jennifer Hudson, y su delgadez, como la de Catherine Zeta Jones.

7. El número de Los Miserables, con todo el elenco cantando en directo, pudo haber sido una maravilla pero lo fastidió Russell Crowe, que canta como el culo, os guste o no.

 8. Adele cantando "Skyfall", para mi de las mejores canciones que se han compuesto para un Bond. Y al recibir su merecidísimo Oscar lloró y apenas pudo hablar. Por cierto, ¿qué le pasó al pelo de Adele dentro del teatro?

9. Salma Hayek en un premio honorífico, tras una broma del aburridísimo Seth MacFarlane sobre ella, Pe, Bardem y el español.

10. Brabra (sí, Brabra) Streisand y su "The way we were", emotivo para algunos, in-so-por-ta-ble para otros. Yo entre los segundos.

11. Jack Nicholson, peinado por el mismo que peinó a Goya Toledo en los Premios Goya, introduce a Michelle Obama que presenta a los nominados a Mejor Película desde la Casa Blanca.
Momento extraño con camareras soldado, o lo que fuesen, tras ella. Sorpresa: sí; raro, también.

12. Sin duda, para mi el momento y la pareja de la noche fue Charlize Theron y Dustin Hoffman. No sabemos lo que él le decía a ella por lo bajini, pero la actriz no paró de reirse.